I
La idea de que todos lleguemos a un nivel de confianza social tal que puedas ir por la calle, descubrirte un cordón desatado y apoyarte en el hombro del extraño que tengas al lado para enlazarlo de nuevo, como harías con un amigo que te acompañase en el paseo.
II
Llevo dos días hablando en inglés, como en un curso de inmersión. Al principio todo era ¿cuántos años tienes? ¿qué estudias? Al final termino enfrascada en una conversación sobre los saltos metalépticos en la obra se Salinger. Me esfuerzo en explicar que cuando hablo en castellano resulto mucho más inteligente.
III
Algunas personas que no tienen nada que ver con el punto anterior me ofrecen, casi con total seguridad, la posibilidad de irme a Cincinnati a hacer un doctorado. Después me encuentro con Martín que años atrás estuvo en algo parecido y me dice «Estados Unidos es el mal».
IV
Mi cerebro es tan soberbio que después de dos días es capaz de intentar soñar en inglés. Si alguien escuchara mis pensamientos sentiría vergüenza ajena. Leo en Prisión Perpetua que Nietzsche decía que los grandes escritores no aprendían más lengua que la suya por procurar dominarla; estoy de acuerdo.
Jessie Crisis 
A mi también me pasaba que al hablar en inglés parecía un niño de 7 años, pero supongo que es porque aprendemos el inglés elemental no el que hablan en círculos elitistas, en cualquier caso, el inglés (tú como filóloga lo sabrás) tiene estructuras mucho más sencillas que el castellano, por eso siempre suena más simplón.
Lo de que EEUU es el mal, es una opinión, siempre es mejor experimentarlo por uno mismo, que no te lo cuenten. como a mi lo de las ecoaldeas xDD abrazos!